APOLO JEESUS
Ahí sentada, como alguien que espera, vendiendo playeras. Habla perfecto español. Se ve muy tranquila ahí, inmóvil, pero por dentro es una caldera que bulle.
"Viví en Argentina nueve meses; he estado en España, Chile, Montreal... El mundo es muy grande para hacer una pequeña vida", reflexiona.
Y esa inquietud es la que la ha llevado a recorrer el continente donde ella nació y en donde ha descubierto la inspiración para encontrar su sonido.
"Apolo Jeesus surgió en 2017 en Buenos Aires, allá estaba estudiando y pasando el tiempo con tantos freaks que hacen música experimental", revela.
Esta chica neoyorkina absorbió todos esa cultura sudamericana y con la experimentación trató de salirse de su zona de confort.
"Hay una gran cantidad de ritmos en Latinoamérica, y el público en Estados Unidos no los conoce, la encasillan en un solo género. Eso me molesta un poco", se queja.
¿Y cómo definirías tu sonido?
"Siempre me alejo del género. Para mí etiquetar así la música no sirve, es una caja conceptual que te limita. Mis canciones son super personales, irónicas, traviesas y a veces serias.
CANCIÓN
Este proyecto nació 2017, me gradué de la universidad, tomé una pausa de un año, aún no he lanzado un disco, solo son demos, es Bandcamp. Mi padre me ha ayudado, él es un ingeniero de audio amateur y él y yo trabajamos juntos y aprendemos juntos. Es fantástico.
Hacer una gira en latinoamérica. Me encantaría tener una banda, hay mucho potencial en las canciones. Yo no puedo hacer una batería en vivo. Todo lo hago con sintetizadores pero en mi opinión nadie puede reemplazar una batería en vivo.
Yo nunca quiero dejar de viajar, tiene que ver mucho con mi trabajo.
Me encanta cocinar. Después de tocar nunca tengo hambre, Me encanta cocinar pizza.
Un juego de palabras para decir "apologize"
Surgió en 2017 en Buenos Aires, allá estaba estudiando y rodeada de tantos músicos, para componer con más intención
Gira pronto en Bogotá, Lima y Buenos Aires...
Hay una gran cantidad de ritmos en Latinoamérica, y el público en Estados Unidos no los conoce, la encasillan en un género latino. Me molesta. He descubierto música interesantísima. La música experimental argentina.
Este proyecto nació 2017, me gradué de la universidad, tomé una pausa de un año, aún no he lanzado un disco, solo son demos, es Bandcamp. Mi padre me ha ayudado, él es un ingeniero de audio amateur y él y yo trabajamos juntos y aprendemos juntos. Es fantástico.
Siempre me alejo del género, para mí etiquetar así la música no sirve, es una caja conceptual que te limita. Pero si tuviera que elegir un género diría que es pop experimental. He pasado el tiempo con tantos freaks que hacen música experimental y yo absorbo algunas aspectos de esta música pero tengo mis propios impulsos que son diferentes y la mezcla es algo que intenta apelar a la gente pero también es un poco salirse del confort.
Me gusta escuchar mucha música y de ahí me paso a componer. Depende mucho el instrumento que estoy escuchando, mis cosas van mucho con la guitarra y ahora compongo con mis secuenciadores.
Mis canciones son super personales, irónicas, traviesas y a veces serias. Un juego linguistico y musical: puedes tener una canción con un beat muy movible, pero en la letra hay un mensaje más oscuro, eso me encantan.
Yo nunca quiero dejar de viajar, tiene que ver mucho con mi trabajo.
Me encanta cocinar. Después de tocar nunca tengo hambre, Me encanta cocinar pizza.
Hacer una gira en latinoamérica. Me encantaría tener una banda, hay mucho potencial en las canciones. Yo no puedo hacer una batería en vivo. Todo lo hago con sintetizadores pero en mi opinión nadie puede reemplazar una batería en vivo.
Ahí sentada, como alguien que espera, vendiendo playeras. Habla perfecto español. Se ve muy tranquila ahí, inmóvil, pero por dentro es una caldera que bulle.
"Viví en Argentina nueve meses; he estado en España, Chile, Montreal... El mundo es muy grande para hacer una pequeña vida", reflexiona.
Y esa inquietud es la que la ha llevado a recorrer el continente donde ella nació y en donde ha descubierto la inspiración para encontrar su sonido.
"Apolo Jeesus surgió en 2017 en Buenos Aires, allá estaba estudiando y pasando el tiempo con tantos freaks que hacen música experimental", revela.
Esta chica neoyorkina absorbió todos esa cultura sudamericana y con la experimentación trató de salirse de su zona de confort.
"Hay una gran cantidad de ritmos en Latinoamérica, y el público en Estados Unidos no los conoce, la encasillan en un solo género. Eso me molesta un poco", se queja.
¿Y cómo definirías tu sonido?
"Siempre me alejo del género. Para mí etiquetar así la música no sirve, es una caja conceptual que te limita. Mis canciones son super personales, irónicas, traviesas y a veces serias.
CANCIÓN
Este proyecto nació 2017, me gradué de la universidad, tomé una pausa de un año, aún no he lanzado un disco, solo son demos, es Bandcamp. Mi padre me ha ayudado, él es un ingeniero de audio amateur y él y yo trabajamos juntos y aprendemos juntos. Es fantástico.
Hacer una gira en latinoamérica. Me encantaría tener una banda, hay mucho potencial en las canciones. Yo no puedo hacer una batería en vivo. Todo lo hago con sintetizadores pero en mi opinión nadie puede reemplazar una batería en vivo.
Yo nunca quiero dejar de viajar, tiene que ver mucho con mi trabajo.
Me encanta cocinar. Después de tocar nunca tengo hambre, Me encanta cocinar pizza.
Un juego de palabras para decir "apologize"
Surgió en 2017 en Buenos Aires, allá estaba estudiando y rodeada de tantos músicos, para componer con más intención
Gira pronto en Bogotá, Lima y Buenos Aires...
Hay una gran cantidad de ritmos en Latinoamérica, y el público en Estados Unidos no los conoce, la encasillan en un género latino. Me molesta. He descubierto música interesantísima. La música experimental argentina.
Este proyecto nació 2017, me gradué de la universidad, tomé una pausa de un año, aún no he lanzado un disco, solo son demos, es Bandcamp. Mi padre me ha ayudado, él es un ingeniero de audio amateur y él y yo trabajamos juntos y aprendemos juntos. Es fantástico.
Siempre me alejo del género, para mí etiquetar así la música no sirve, es una caja conceptual que te limita. Pero si tuviera que elegir un género diría que es pop experimental. He pasado el tiempo con tantos freaks que hacen música experimental y yo absorbo algunas aspectos de esta música pero tengo mis propios impulsos que son diferentes y la mezcla es algo que intenta apelar a la gente pero también es un poco salirse del confort.
Me gusta escuchar mucha música y de ahí me paso a componer. Depende mucho el instrumento que estoy escuchando, mis cosas van mucho con la guitarra y ahora compongo con mis secuenciadores.
Mis canciones son super personales, irónicas, traviesas y a veces serias. Un juego linguistico y musical: puedes tener una canción con un beat muy movible, pero en la letra hay un mensaje más oscuro, eso me encantan.
Yo nunca quiero dejar de viajar, tiene que ver mucho con mi trabajo.
Me encanta cocinar. Después de tocar nunca tengo hambre, Me encanta cocinar pizza.
Hacer una gira en latinoamérica. Me encantaría tener una banda, hay mucho potencial en las canciones. Yo no puedo hacer una batería en vivo. Todo lo hago con sintetizadores pero en mi opinión nadie puede reemplazar una batería en vivo.