“¿CÓMO NO VAS A TOMAR PARTIDO, SI TIENES UN PAÍS QUE TE DUELE?”


El periodista venezolano Alonso Moleiro nos habla sobre la responsabilidad ciudadana más allá del oficio

Venezuela está a unos días de celebrar elecciones presidenciales. La polarización de los sectores sociales, al igual que el incremento de la violencia es enorme.

El presidente Hugo Chávez está en la posibilidad de ser reelegido y con ello asegurar llegar a los 20 años de mandato en 2019, una situación que divide al país sudamericano entre los que lo ven como un Dios y otros que lo ven como el Diablo.

“La polarización en Venezuela es dos veces mayor de lo que se vive aquí en México. El dilema de Venezuela es muy grave: o vamos a consolidar un Estado democrático y plural ó vamos a consolidar un Estado unidimensional y revolucionario”, habla el periodista Alonso Moleiro.

Alonso Moleiro, quien es Vicepresidente del Colegio Nacional de Periodistas en su país, es un ferviente opositor al gobierno chavista. Asegura que el papel del periodismo no puede quedar limitado a ser un simple narrador de hechos sino también a mostrar abiertamente la ideología.

“El periodista toma parte de esa dinámica y esa polémica y necesariamente tiene que hacer un trabajo civil que va más allá de su oficio inmediato que es informar, porque además el deber de un periodista no nada más es informar, los periodistas están facultados para opinar”, afirma Moleiro.

“Lo que no tienes que ser es deshonesto. Yo creo que es necesario cumplir con los mandatos de la objetividad pero ejerciendo el derecho a la subjetividad”, agrega.




EL PAPEL DE LOS MEDIOS

La polarización de Venezuela se acrecentó en 2002 cuando se dio un efímero golpe de Estado contra Chávez que duró sólo dos días. El gobierno oficial denunció un “golpe mediático”, argumentando que algunas empresas privadas de comunicación, como Radio Caracas Televisión, censuraron información e incluso promovieron el derrocamiento.

Para 2007 la concesión de RCTV no fue renovada y el presidente Chávez dijo que la libertad de expresión le pertenecía al pueblo y no a una empresa golpista. Esto no dejó un buen sabor de boca a la gran mayoría de periodistas venezolanos.

“Los medios en Venezuela están en una gran crisis, porque su existencia misma está en riesgo. La dificultad principal tiene que ver con un enfrentamiento pacífico con los medios del gobierno, que tienen la intención de apropiarse de toda la sociedad civil venezolana”, asegura Alonso Moleiro.

El columnista del periódico El Nacional apuesta por reivindicar a los medios públicos ya que, como en México, las grandes empresas mediáticas tampoco ofrecen contenidos de calidad que fomenten la creatividad o la cultura.

“Hay que rescatar el valor de los medios públicos. Devolvérselos al Estado venezolano, que haya un intercambio entre la sociedad y el Estado y que los medios privados regresen a su función principal de informar, orientar, educar y formar valores”, propone el periodista.

Sin embargo, Alonso afirma que esto será posible solamente con la derrota de Hugo Chávez el próximo 7 de octubre, y él se compromete a hacer su parte a través de la pluma.

“La regla número uno es derrotar al presidente Hugo Chávez y restituir la noción de alternatividad democrática y republicana. Mientras Chávez siga siendo presidente eso es imposible. Sin querer derrocarlo, sin incitar a la violencia, sin decir mentiras, yo tengo que formar parte de esa pelea”, se convence.

Con los objetivos claramente planteados, Alonso Moleiro  ha usado al Internet como su herramienta principal, sobre todo el Twitter donde tiene a más de 50 mil seguidores.

“Internet es una vacuna contra la censura. Los dioses de los medios se están acabando, ahora tú eres el que decide, es horizontal. Eso lo posibilita el Twitter, que es tú trinchera, el Facebook y los blog personales.

“Gracias a Internet cada vez es más difícil mentir. Se fragmenta la información. Tú eres quien participa en el debate”, declara el bloggero.


CHAVEZ, EL GOBIERNO Y LA OPOSICIÓN

En 2004 Hugo Chávez ganó un referéndum, con reconocimiento de la OEA y del centro Carter, que en 2006 le permite competir en las elecciones con las que fue reelecto.

Su popularidad se fue yendo a la baja desde entonces. Su partido pierde las elecciones de 2007 y su propuesta de un referéndum es rechazada. Sin embargo, en 2009 nuevamente propone la enmienda a la Constitución y en elección popular la ciudadanía le da el sí para que Chávez vuelva a competir en 2012 por la reelección. Situación que no alegró a la oposición.

“Esta gente gobierna mal. Tienen 14 años gobernando y pretenden tener otros 20 si ganan la elección. ¿Cómo no vas a formar parte, si tienes un país que te duele? Yo lo que no voy a hacer es dar un golpe de Estado, no voy a inventar cosas ni decir falacias, pero yo sí formo parte de la oposición y no me da ninguna pena decirlo”, dice Alonso Moleiro.

“En este momento yo no puedo decir que soy imparcial. Yo no soy imparcial”, enfatiza el analista político.

Henrique Capriles, quien estuvo preso 120 días acusado de dirigir un asalto a la embajada de Cuba en Caracas durante el golpe de Estado de 2002, es el candidato quien representa a la oposición contra Hugo Chávez.

¿La clave para que  la oposición gane los comicios?

“La oposición gobierna los estados más poblados del país. En la última elección fue mayoría en 16 ciudades. Domina las universidades y la fuerza sindical.

“A la oposición le faltaba más conexión con los sectores populares, liderazgos más auténticos. Pero la oposición hizo algo importante: está unida en una plataforma común con todos los partidos de oposición. Hace 5 años eso se veía totalmente quimérico. Ya es una realidad”, afirma el también locutor de radio.

Alonso Moleiro termina advirtiendo que "el presidente Chávez sigue siendo un hombre fuerte, sigue siendo un hombre astuto y con mucho dinero”.